Nacido en 1920, en Panamá (dado que su madre había preferido trasladarse allí para dar a luz), aunque de familia cartagenera, residió en Bogotá, a los veinte años y siendo todavía un estudiante, recibió una Mención de Honor en el Primer Salón de Artistas Nacionales con la obra Mulata Cartagenera. La obra resulta de un interés extraordinario porque sirve para contextualizar las tendencias del momento en el arte del país (1940), sobre todo a nivel de la enseñanza, y entender la resistencia con la que Obregón tuvo que luchar durante su corta estadía como cabeza de la Escuela de Bellas Artes. La pintura en cuestión pone también en evidencia la natural habilidad técnica de Grau.
http://www.youtube.com/watch?v=NXVkfNQYUVc
"MULATA CARTAGENERA"
El gobierno colombiano concedió entonces una beca al joven Grau para estudiar en Nueva York, en The Arts Student League, donde permaneció hasta 1943. A su regreso a Bogotá, Grau, junto con Obregón, Negret, Ramírez Villamizar, además de otro grupo de jóvenes artistas, comenzó a figurar activamente en los círculos artísticos, salones y primeras galerías comerciales.
En su técnica exquisita intervienen un sólido dibujo y un tratamiento refinado de la materia pictórica, resultado en parte de sus muchos entrenamientos, incluyendo sus estudios de pintura y técnica del fresco en la Academia de San Marco de Florencia. Su carácter abiertamente figurativo se constituyó en una saludable alternativa en un momento en que la geometría pareció dominar los lenguajes internacionales.
Grau gano galardones,como por ejemplo, le fue concedido a Grau en 1962, con la pintura Gran Bañista. La pintura recibió el premio "Ministerio de Educación" en el XIV Salón Anual de Artistas Colombianos.
"GRAN BAÑISTA"
Quien no posee la sensibilidad para entender la sensualidad que la técnica puede proveer a la imagen pintada, o dibujada, sin necesidad de acudir a una "historia" específica o descripciones ilustrativas, es probable que no comprenda completamente la dimensión dentro de la cual gravita el mundo pictórico de Enrique Grau. En él se combina una aparente arbitrariedad en la asociación de figuras y objetos. Pero detrás de la premeditación en la puerilidad de ciertas situaciones, la superficialidad, la ligereza y el estudiado desarreglo, se esconden, como en el alma humana, los más complejos sentimientos, deseos y racionalizaciones, cuya exteriorización adquiere de acuerdo a la personalidad individual la más curiosa de la materializaciones, desafiando la tibieza de corazón y la mogigatería de la convención humana.
Durante los años ochenta y hasta la actualidad, Grau ha practicado igualmente la escultura, y de ella se incluye El Beso, que es parte de los estudios de otra pieza mayor. A lo largo de su carrera, al igual que Obregón, Grau ha realizado varios murales, y actualmente trabaja en la cúpula y el telón de boca del Teatro Heredia de Cartagena, ciudad en la que ha vivido casi toda su vida recibiendo la distinción, al igual también que Obregón, de "Hijo Predilecto de Cartagena de Indias".
"EL BESO"
"RITA"
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